El hotel Maison de Josephine en Francia es uno de los establecimientos en los que hemos estado de viaje que más nos ha gustado y del que despedirnos nos entristeció un poco. Nuestra estancia fue corta, de una sola noche, pero suficiente para recordar nuestro paso por allí con mucha satisfacción y quedarnos con las ganas de repetir en un futuro.
En uno de nuestros viajes familiares por el sur de Francia pasamos la última noche en territorio francés en la localidad de Villenouvelle, a muy pocos kilómetros de Toulouse. Es aquí donde se encuentra este estupendo establecimiento que queremos recomendar.
Seguramente el hotel Maison de Josephine no es el más grande, ni el más bonito de todos los hoteles que puedes encontrar en Francia, ni el que tiene una piscina de mayor tamaño, ni nada por el estilo, pero igualmente nos encantó. Principalmente debido a que nos sentimos muy a gusto y muy bien tratados en su establecimiento, casi como en casa.
A poco rato de llegar nos montamos en unas bicis que están a disposición de los clientes y nos fuimos a dar una vuelta por los alrededores de esta localidad de la región de Haute-Garonne con la idea de alcanzar el tramo del Canal du Midi que cruza por los límites del pueblo . Fue un paseo estupendo que estiramos casi hasta la puesta de sol.
Al regresar al hotel Maison de Josephine nos encontramos con un aperitivo delicioso en el jardín, y todos los allí presentes charlando amistosamente, también los dueños. Nos sumamos al corro y como era de esperar los niños se abalanzaron sobre los entremeses y otras viandas dispuestas en la mesa. ¡Había hambre! Todo parecía tan natural e improvisado que por un momento pensamos que se trataba de una celebración familiar de los responsables del hotel a la que nos habían invitado.
Pero no, el resto de personas eran huéspedes igual que nosotros. Un par de parejas y un grupito de 4 personas, todos franceses, que estaban haciendo turismo por la región.
Al cabo de un rato pasamos al comedor para sentarnos en una única mesa todos los comensales y cenar. Debo confesar que teníamos cierta inquietud pues a veces sucede al viajar con niños que no todo sale como uno desearía y no queríamos fastidiar a los demás con algún pequeño problema. Pero al final resultó una cena exquisita y muy divertida en la que terminamos cantando a la una todos los comensales y que los niños recuerdan con mucha emoción. En definitiva una cena genial.
Después disfrutamos de un merecido descanso en la segunda planta del edificio, en la habitación Isabelle, que comunicaba con otra preciosa habitación en la que los peques durmieron como troncos después de un completo día viajando por Francia.
Al día siguiente muy temprano dejamos este estupendo establecimiento de la red Gîtes de France después de un copioso desayuno. Estamos convencidos que un día volveremos a alojarnos en este estupendo hotel del sur de Francia.
Galería de imágenes Hotel Maison de Josephine y Villenouvelle
Te invito a la página de Facebook de Viajares para seguir conversando sobre viajes con niños y los mejores destinos para ir en familia. También nos podemos encontrar en INSTAGRAM o en Twitter si prefieres.