Gracias a nuestros amigos de Escapada Rural hemos podido viajar en familia para conocer el precioso Vall de Lord en la comarca del Solsonès, en Lleida. Nuestro campamento base ha sido el establecimiento de turismo rural Casa Vilasaló. Y no es una casa rural cualquiera.

En primer lugar el emplazamiento es espectacular y proporciona unas vistas preciosas sobre las aguas del pantano de Llosa del Cavall. Desde todas las ventanas de la casa se puede observar el cambio de tonalidad de las aguas en función de las horas del día y la meteorología. También hacia el norte podemos distinguir el Port del Comte y La Coma i La Pedra. El pantano define totalmente la zona y en su día fue el motivo inicial de abrir el negocio de turismo rural. En el año 1999 se inició su construcción y la masía empezó el negocio como alternativa a la pérdida de pastos y terrenos anegados por las aguas. Es más, por aquel entonces, se trataba de la primera iniciativa de casa de turismo rural en toda la preciosa Vall de Lord.

El alojamiento se combina con la restauración en Casa Vilasaló, y hemos podido saborear los platos que cocina el hijo de la dueña Marta en el restaurante. Casa Vilasaló tiene el sello de un negocio familiar, y nosotros, una familia con hijos pequeños nos hemos sentido muy a gusto y bien tratados.

En los apartamentos de Casa Vilasaló dispondrás de todas las comodidades necesarias si viajas con niños o si te mueves con un grupo de amigos. La casa está bien equipada y en la cocina encontrarás los utensilios y cacharros apropiados para preparar tus comidas. De todas formas te recomiendo el restaurante como una buena opción teniendo en cuenta la relación calidad precio.

Actividades con niños en Casa Vilasaló

¿Qué hacer en la casa rural? Hay propuestas muy interesantes y sitios especiales en los alrededores de Casa Vilasaló. En una escapada rural con niños cada familia buscará las actividades que más se ajusten a su perfil. Nuestra idea general es siempre pasarlo bien y no morir en el intento. Con niños de 2, 4 y 6 años no vale la pena hacer «grandes planes» y nos apetece más improvisar o dejarnos seducir por algún comentario o propuesta de los locales que encontramos.

Lo que más nos gustó de nuestro fin de semana con niños fue el baño improvisado en el pantano de la Llosa del Cavall. Haciendo el reconocimiento de la zona cercana a la casa llegamos hasta la orilla del embalse. Hacía un calor intenso y el agua de color verde turquesa nos llamaba con fuerza. Los niños, más atrevidos,  empezaron remojándose los pies y al final terminamos todos chapoteando en las frías aguas y armando un buen jolgorio. Por suerte una pareja que se disponía a navegar en kayak por el pantano nos prestó una toalla.

Más actividades con los niños en la casa rural: Escuchar cantar los pájaros, buscar mariquitas, tirar piedras al agua, adivinar a qué hormiguero se dirigen las hormigas, tratar de cazar una libélula, ver pasar las nubes y sus reflejos en el pantano, descubrir un pato salvaje, dejarse lamer por los perros que guardan la casa o atrapar una lagartija. ¡Grandes pequeñas aventuras del turismo rural con peques!.

Sant Llorenç de Morunys

En 5 minutos desde la casa rural se llega a la población de Sant Llorenç de Morunys. Allí es muy recomendable dar un paseo por la parte antigua de la población recorriendo sus estrechas calles. Llama la atención especialmente que muchas casas están bien identificadas con placas en el exterior: Cal Sabater, Cal Pascuet, Cal Amills, Cal Secretari,  etc.. Seguramente sin darte cuenta llegarás a la iglesia de Sant Llorenç de Morunys. Es una joya que no puedes dejar de visitar si estás en la zona de Vall de Lord. En su interior exhibe retablos de gran valor y una capilla, la de la Mare de Déu dels Colls, de estilo barroco total. La iglesia o monasterio tiene sus orígenes en el románico, allá por el año 885. Nos encantó girar alrededor del claustro, tan acogedor, sencillo y lleno de paz.

Saliendo de la iglesia y siguiendo cuesta arriba pasamos por debajo de una de las puertas del antiguo clos medieval para llegar al pequeño parque de la Plaça de les Eres. Es una zona ajardinada ideal para los niños, con columpios y zonas de juegos. Desde allí podemos gozar una perspectiva diferente sobre la iglesia mientras los peques juegan a su aire.

Sant Martí de Guixers

Visitamos la iglesia románica de Sant Martí de Guixers con motivo de la Fiesta Mayor del pueblo de Guixers. Cada año en la celebración dan panes bendecidos, se reparte coca entre la concurrencia y bailan los gegants del lugar. La verdad es que es una iglesia muy linda y fotogénica, rodeada de prados verdes y altas montañas. Visitar las diferentes muestras del románico de la Vall de Lord bien merece el viaje hasta esta parte de Cataluña.

Pantano Llosa del Cavall

Es imposible no quedarse embelesado contemplando las aguas del embalse de Llosa del Cavall. La presencia del agua nos acompaña a todas horas, y el vuelo constante de libélulas o el croar de las ranas al atardecer no hace sino constatarlo una vez más. Hemos visto caer una lluvia fina en gotas que se reencontraban en la gran masa líquida dejando pequeños destellos circulares.

Partiendo de Can Vilasaló y en dirección a Solsona viajamos todo el rato pegados a la orilla del embalse gozando de un paisaje maravilloso. Se ven grupos en kayak que son la envidia manifiesta de los niños. Después de algunas curvas y 4 o 5 túneles llegamos a la impresionante presa y nos detenemos a contemplar su forma y dimensiones. La obra de ingeniería causa furor y con mucho cuidado cruzamos de un lado a otro imaginando cálculos sobre la cantidad de botellas, bañeras, vasos y recipientes de todo tipo necesarios para llenar un embalse así.

En nuestra escapada rural de fin de semana en Casa Vilasaló, hemos dejado atrás el estrés de la ciudad y volvemos con las pilas cargadas de nuevo. Los niños traen de regreso la mochila cargada de buenos momentos y «grandes hazañas» para explicar en el colegio. Reservando un fin de semana de turismo rural en familia en la web de Escapada Rural sabíamos que no nos íbamos a equivocar. La Vall de Lord nos ha encantado y esperamos volver de nuevo para explorar con más tiempo otros rincones y parajes de la comarca del Solsonès.