Cruzando el río

Paseo a caballo por la Sierra de Gredos

Qué sensación de paz y armonía con el paisaje de la Sierra de Gredos viví disfrutando de un paseo a caballo por sus bosques y caminos.

Un estupendo grupo de bloggers de viajes (AtalayaMaribel y Roberto,JD y Egoitz) participantes en el #TBMGredos pasamos una mañana genial entre pinares, respirando aire puro y admirando la belleza de la zona.

Cruzando el río
Cruzando el río a caballo en la Sierra de Gredos

María Elena, la fundadora de Equiberia, tuvo la amabilidad de venir a buscarnos al Parador de Gredos de buena mañana. En un momento llegamos a Navarredonda de Gredos, para coger el desvío hacia las instalaciones de su propiedad. En total 10 minutos de alegre conversación entre gente que le gusta narrar historias y comunicarse abiertamente.

María Elena y sus dos simpáticas ayudantes ya tenían los caballos ensillados y preparados, y con un vistazo supieron asignar la mejor montura para cada uno. En mi caso fui agraciado con la yegua India, y no me despegaría de ella hasta altas horas de la madrugada. Pero vayamos por partes.

Nuestra actividad empezó con una pequeña charla explicativa, la selección de un casco y la firma de un documento por aquello de los seguros. Me pareció muy acertado y natural , ya que pasarlo bien no significa hacer las cosas a lo loco. A continuación fuimos montando cada uno de los caballos y tomamos una clase de «conducción» comprimida. Recibimos instrucciones sobre como indicar al animal la dirección que tomar, nos ejercitamos tocando la cabeza o la grupa del caballo y aprendimos las nociones básicas para distribuir correctamente nuestro peso entre los estribos y la silla.

Paseo a caballo por la Sierra de Gredos
Paseo a caballo por la Sierra de Gredos entre pinares
El entorno natural de la Sierra de Gredos
El entorno natural de la Sierra de Gredos

Con la lección aprendida dejamos atrás las instalaciones de Equiberia e iniciamos nuestro deseado paseo a caballo por la Sierra de Gredos marchando en fila por un camino de tierra con una gran ilusión. A lomos de los caballos nos sentimos felices y alegres. Las aceleradas clases nos permitieron cabalgar despreocupadamente y fijar nuestra atención en la tremenda belleza del paisaje. Primero cruzamos una parte de pastos y campos más abiertos para luego adentrarnos en un camino rodeado de un espeso bosque de pinos.

Egoitz combinando equitación y social media a la vez
Egoitz combinando equitación y social media a la vez

La conversación fluía entre nosotros cuando pronto llego la hora de cruzar el río. Fue un momento especial para todos, vivido como si de una gran proeza se tratara. ¡Prueba superada! Seguimos nuestra excursión y ya con más confianza alternamos el ligero caminar de los animales con algunos momentos poniendo los caballos al trote.

María Elena nos guío de una manera fenomenal y pacientemente contestó todo tipo de preguntas sobre equitación y acerca de los servicios que ofrece su empresa. Queríamos saber los detalles de las rutas a caballo de una semana que organiza, llevando a sus clientes por lindos rincones de Gredos mientras la cena y el descanso aguardan en los mejores establecimientos de la zona.

Los jinetes con María Elena de Equiberia
Los jinetes con María Elena de Equiberia

Cuando más estábamos disfrutando llegó la hora de volver al punto de salida. Bajamos de las monturas con una gran sonrisa en nuestras caras y las posaderas algo doloridas. Para celebrar nuestra ruta a caballo y reponer fuerzas en Equiberia nos obsequiaron con cerveza bien fría, jamón y queso. Todo desapareció sin dejar apenas rastro. Fue el momento de los comentarios, las risas, las anécdotas y las valoraciones, todas ellas positivas con la experiencia ecuestre.

El amable equipo de Equiberia
El amable equipo de Equiberia

Sin tiempo para nada más nos despedimos, y el grupo de blogueros nos dirigimos directamente hacia Madrid. Nos envolvía un aroma especial, pues viajamos sin tiempo para un cambio de vestimenta, y aquello de viajar en una nube no era metáfora sino realidad. ¡Una nube de olor a caballo!

La presencia de la yegua India me acompañó todo el viaje de vuelta hasta la ciudad de Barcelona. Sus aromas sobrevolaron media península y cuando finalmente después de un prolongado retraso del avión llegué a mi casa India todavía estaba allí. Y con ella un recuerdo fantástico del paseo a caballo por los montes de Gredos.

 

2 comentarios en “Paseo a caballo por la Sierra de Gredos

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