Hace mucho tiempo que conozco a Victòria Peñafiel y me apetecía hacerle una entrevista ya que tengo la certeza que el gran trabajo que está desarrollando con sus fotografías de bebés va a gustar a los lectores del blog. Yo no me canso de mirar su fotos y vuelvo periódicamente a su web a echar un vistazo a sus nuevos trabajos. Las fotos transmiten una paz inmensa y son deliciosas

Decir también que Victòria y Leo son los papis felices de cinco niños, y no les falta ni el humor ni el amor para manejar una familia numerosa. No sé si viajan con los niños a menudo, pero seguro que entretenimiento y jaleo no falta en su casa. Os dejo con la entrevista a Victòria y sus bellas fotos que congelan los primeros pasos de un gran viaje llamado vida.

Entrevista a Victòria Peñafiel

Victòria, explícanos un poco tu trayectoria en la fotografía. Yo recuerdo un proyecto llamado Bisions muy interesante, y tenías un fotoblog creo también… ¿Cómo has llegado hasta aquí?

No lo sé muy bien, en parte por casualidad y en parte porque fue un camino natural. Mi profesión han sido siempre las letras, pero después de pasarme 8 horas al día traduciendo ya no me quedaban ganas de leer ni una palabra más, de modo que cambié la lectura por la imagen. Hice un curso de iniciación, aproveché internet como gran fuente de datos y el auge de la fotografía digital para adentrarme en una nueva disciplina. En realidad, fue una excusa para salir a la calle y dejar de mirar la pantalla. Una cosa llevó a la otra, y el hobby se convirtió en obsesión.

¿Cuando empezaste con la fotografía de recién nacidos más en profundidad?

Con el nacimiento de mi tercer hijo me planteé hacer de ello algo más serio, aunque mi transición hacia la fotografía como profesión ha sido realmente muy gradual. Al principio pensé que no podía ser algo muy complicado – al fin y al cabo, los bebés duermen muchas horas; solo habrá que desnudarlos y ponerles sobre una manta, ¿no? Tras dos o tres intentos, con mi propio hijo y con los de algunas amigas que salieron de cuentas más o menos al mismo tiempo que yo, me di cuenta enseguida de que era terriblemente difícil obtener un resultado presentable y que había muchos aspectos que tener en cuenta. Quizás otra persona en ese punto lo habría dejado, pero me lo tomé como un reto que me alentó a ir más allá.

¿Qué se necesita para que una sesión con bebés sea redonda?

Si por «redonda» entiendes una gran variedad de posturas con el bebé durmiendo: mucho tiempo por delante, un ambiente cálido, grandes dosis de paciencia, tanta experiencia como sea posible, un par de manos extra… y una pizca de suerte. Pero, con los años, he entendido que esas condiciones ideales no siempre se dan, y que los bebés también tienen días buenos y días no tan buenos, y no por ello se es peor fotógrafo si no se consiguen «x» poses. Entiendo que mi tarea es fotografiarles desde todos los ángulos posibles y captar detalles específicos de su aspecto o su forma de ser – y eso incluye sonrisas involuntarias, pero también bostezos e incluso llantos. La magia de los bebés es, precisamente, que son impredecibles. Son perfectos sean como sean, y estén como estén.

¿Y también haces fotografías de familias verdad? En su hábitat natural de desorden y vida cotidiana…

Después de dos años fotografiando a recién nacidos y ocasionalmente bebés con un control máximo sobre todos los detalles de la imagen, sentí el impulso de irme hacia el extremo opuesto. Las fotos de familia (a las que he apodado «sesiones xulo xulo») son un proyecto personal al que le tengo mucho cariño y en el que creo 100%. Entiendo que muchas familias tienen reservas a la hora de mostrar su cruda realidad: el desorden, la casa patas arriba, la imperfección inherente en el entorno de cualquier familia con niños… y el temor a verse poco agraciados. Pero estoy segura, segurísima de que esas fotos con los años adquieren un valor sentimental elevadísimo, precisamente porque son un retrato real de una experiencia vivida en primera persona, sin falsear, de un ambiente y unas relaciones que se extienden a lo largo de los años.

Desde el punto de vista visual, la propuesta es opuesta a la de una sesión en estudio: no hay posados, apenas hay dirección por mi parte, y me limito a ser una espectadora de lo que esa familia quiera mostrarme ese día. Funciona muy bien con las personas  «alérgicas» a la idea de posar ante una cámara.

Realizas talleres y cursos con bastante regularidad ¿A parte de la formación, hay nuevos proyectos a la vista relacionados con tus fotos?

Hace tiempo que tengo intención de fotografiar varios partos, ya sea en el hospital o en casa, pero la verdad es que cuesta encontrar a gente dispuesta y hospitales que abran las puertas a un acompañante distinto del marido. Me gustaría conseguir una pequeña paleta de experiencias de parto y usarlo como punto de partida para un libro…

Explícanos para terminar si te gusta viajar, si hacéis viajes con los niños o algún plan favorito con los peques que quieras recomendar a los lectores del blog.

Me encanta viajar, sobre todo fuera del país, pero lamentablemente con los niños mi movilidad se ha visto muy reducida. Por no tener, no tenemos ni siquiera coche, así que todo se complica…

¿Un plan favorito? Las cosas más sencillas: una visita a la playa fuera de temporada o un paseo sin rumbo específico, porque siempre hay sorpresas. Y sobre todo, escapadas para tener más contacto con la naturaleza: creo que a los niños les aporta muchísimo (yo lo disfruté de pequeña y es algo que ellos no tienen tan a mano al vivir en la ciudad) .

Muchas gracias Victòria por completar este extenso cuestionario y mucha suerte en todos tus proyectos. Estoy convencido que tus fotos habrán impactado a más de un lector o seguidora del blog. ¿Verdad que sí?