Recién aterrizados después de nuestro viaje con los niños a Cantabria, parece como si en nuestro cuerpo resonara todavía un eco de las intensas emociones y experiencias que hemos vivido. Y en nuestra cabeza aparecen flashes y escenas brillantes de forma parecida a un sueño, pero en este caso son bien reales. Es que hemos sido los protagonistas de tales secuencias.
Éstos que os presento a continuación, son algunos fragmentos, una sucesión de «best moments», fotogramas destacados de una película rodada en unos escenarios de gran belleza, con localizaciones inmejorables (Santander, la playa de Loredo, el parque de la Naturaleza de Cabárceno, Cabuérniga…) y que queremos compartir. También deseamos completar el ejercicio de intentar fijarlos en el tiempo para hacerlos durar más, y así retener un poco el buen sabor de boca que nos deja el viaje a #CantabriaconNiños.
Acción, adrenalina y emociones fuertes en Cabuerniaventura
Para empezar una buena ración de ejercicio, emociones fuertes y equilibrios en las alturas. El escenario era el Parque Temático Multiaventura de Cabuérniga. ¡Lo dimos todo nada más llegar a Cantabria!
Después del calentamiento vino la guerra armados con pistolas láser y divididos en dos grupos. Un bando se llamaba «Los Tirolinas» y en frente tenían a «Los Flechas». Cuidado si te los encuentras por ahí, tienen malas pulgas.
¡Esto es la guerra total! Ja ja ja @cant_infinita @Cabuerniaventur #cantabriaconniños pic.twitter.com/7NItGgvSzd
— Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 2, 2015
Aquí puedes ver más acción y diversión todavía en el parque multiaventura. El protagonista del siguiente vídeo es mi hijo mediano, tirándose por una tirolina de campeonato.
Tirolinas, desafío, tiro con arco, puentes.. Lo pasamos en grande en #CantabriaconNiños Un vídeo publicado por Daniel Ruiz (@viajares) el
Amanecer en el bello pueblo de Renedo
Nos habían avisado, pero igualmente nos sorprendió la gran belleza de algunos pueblos y rincones de Cantabria. Cruzando un mar siempre verde de prados y bosques llegamos a la Posada el Roblón, en Renedo. Allí Luisma nos trató de maravilla, con una excelente cena y cinco cómodas camas.
Después de un merecido descanso y un desayuno de campeonato iniciamos la jornada con un agradable paseo por los alrededores.
En #CantabriaConNiños amanecemos en Renedo. Precioso! pic.twitter.com/sjy8ZGVJsA
— Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 3, 2015
El Desfiladero de la Hermida
Camino de los Picos de Europa atravesamos el precioso Desfiladero de la Hermida, con la duda a veces de si habría suficiente espacio en la carretera para pasar, pues impresiona la estrechez en algunos tramos. Pero sí, siguiendo el curso del río Deva llegamos hasta Cillorigo de Liébana para informarnos y familiarizarnos con el Parque Nacional de los Picos de Europa. La Oficina de Información y Centro de Visitantes de «Sotama» es un gran edificio rectangular que no pasa desapercibido.
Camino de los #PicosdeEuropa atravesamos el Desfiladero de la Hermida en #CantabriaConNiños pic.twitter.com/WFltDAvjAM — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 3, 2015
Un buen cocido en lo alto de los Picos de Europa
En los Picos de Europa nos esperaba una niebla que nos fastidió la posibilidad de contemplar el panorama. Sin detrimento de explayarme más adelante con nuestra visita y con la experiencia de subir con niños al Teleférico de Fuente Dé, debo decir que nos encantó la ascensión de cuatro minutos y poco más. ¡Parecía que subíamos al cielo! Una pena que la climatología no acompañó… Pero al mal tiempo buena cara, así que nos concentramos en dar buena cuenta de un excelente cocido lebaniego en el Hotel Refugio de Alvia. ¡Qué nos quiten lo bailado!
Con cocido lebaniego en Refugio de Aliva, Picos de Europa se vence el frío y la niebla #CantabriaConNiños pic.twitter.com/Zc16VSZ1kc — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 3, 2015
El Soplao, una cueva increíble
Otro flash increíble de nuestro viaje a Cantabria que nos viene a la cabeza es el de toda la familia caminando por las mágicas galerías de El Soplao. Sin dejar de mirar al techo y preguntándonos cómo diantres es posible tal acumulación de estalactitas excéntricas. Palabras que por cierto, hacía medio minuto que habíamos aprendido. No se pueden sacar fotos en el interior, así que la que os muestro es una imagen cedida por Turismo de Cantabria.
¡Niños, vamos a Cabárceno!!
Una de las hitos del viaje a Cantabria con niños que sí o sí queríamos completar era una visita al Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Ya habrá tiempo más adelante de explayarme contando los detalles y completando la extensa lista de animales que vimos evolucionar en semilibertad. Ahora queremos transmitir la enorme alegría de los niños (también los mayores disfrutamos, eh?!) al recorrer el parque. Y decir también que ¡se nos hizo tan corta la visita! Sin duda es un lugar en el que las horas pasan volando. Igual es que el tiempo allí también goza de un régimen de semilibertad.
Cómo estamos disfrutando el tour por @PCabarceno !!!! @cant_infinita #cantabriaconniños pic.twitter.com/PvSeKikon1 — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 4, 2015
Alucinando en el parque
Mucha admiración y sorpresa pero a la hora de comer nuestras tres fieras particulares no perdonan. Por suerte en el Restaurante Los Osos, ubicado dentro del mismo parque, nos ofrecieron una rica comida, con el plus de poder seguir contemplando por la ventana los animales. ¡Cabárceno nos encantó!
Un amanecer espectacular en Santander
Un amanecer de los que te invitan a saltar de la cama, después de unos días algo nublados y con algunas lloviznas. Sí, en Cantabria de vez en cuando llueve. Que parezca un jardín y haya mil tonos de verdes que antes ni habías adivinado que existieran es por algo.
Surcando la bahía en una pedreñera
Con la pedreñera de Los Reginas nos camuflamos de locales haciendo ver que íbamos de Santander a Pedreña, o a Somo, al otro lado de la bahía. Pero no, era un simulacro. Lo que queríamos era poder dar una estupenda vuelta y poder contemplar el lindo panorama de la Bahía de Santander. La Isla de la Torre, el Palacio de la Magdalena, la Isla de Mouro y su faro, la preciosa playa del Puntal que enlaza con la de Somo y la playa de Loredo,.. Nuestra derrota náutica nos dejó preciosos cuadros de cielos azules y playas dorada.
A bordo de una «pedreña» recorremos #Santander en un día precioso #Cantabriaconniños @cant_infinita pic.twitter.com/sMcTCUHAKJ — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 5, 2015
Museo Marítimo del Cantábrico
No es por el magnífico esqueleto de ballena que preside la entrada, ni por la sardina bicéfala (sí, has leído bien), ni por el fantástico acuario lleno de especies de todo tipo. Es el todo, un rico conjunto que abarca biología marina, historia, etnografía pesquera y tecnología que nos cautivó. Y desde la terraza del Museo Marítimo del Cantábrico las vistas sobre la Bahía de Santander son una pasada.
La de cosas que aprendemos en el Museo Marítimo del Cantábrico con #Cantabriaconniños Muy recomendable!! pic.twitter.com/WyFlb5rAX0 — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 5, 2015
Surf en la playa de Loredo
Acabamos de terminar nuestra clase de surf en familia en @SurfLaCurva !Brutal Os enseñaré fotos #CantabriaconNiños pic.twitter.com/RciztATeIl — Viajares Daniel Ruiz (@viajares) septiembre 4, 2015
Venían preguntando todo el viaje en qué momento era lo del surf. Así que cuando llegamos a Loredo y entramos en las instalaciones de la Escuela de surf La Curva los niños no se lo pensaron dos veces, y en un periquete ya lucían un neopreno y una tabla bajo el brazo. A los peques les encantó aprender a montar olas del Cantábrico y os aseguro que lo pasaron en grande. Tanto que desde ese momento están preguntando e insisten en que busquemos clases de surf en Barcelona. Otro flash que se repite en mi cabeza recordando nuestro fabuloso viaje a Cantabria con niños y nuestra toma de contacto con el surf tiene un formato sonoro y voz de niño. – Papá, pero si es muy fácil decían mis dos hijos mayores. ¡Hay que ver! Qué envidia. Quién pudiera recuperar la facilidad de los críos para aprender cualquier cosa. Mira aquí cómo aprendimos a hacer surf en familia.
Después de mostrar todos estos instantes, retales de un viaje fantástico por Cantabria, tenemos una gran tarea por delante. No es que estemos tan preocupados como Leonard en el film Memento, pero sí que vamos a tratar de organizar bien este puñado de flashes en un discurso cronológico más ordenado. Así que os emplazo a estar atentos a los artículos futuros sobre #CantabriaconNiños en los que desgranaré algunas de las visitas que hicimos, con ideas sobre qué hacer en Cantabria y qué ver.
Visitar Cantabria con los niños
Queremos agradecer a la Oficina de Turismo de Cantabria las facilidades ofrecidas para poder viajara Cantabria en plan familiar.
Viaje completito completito, me alegro que os haya gustado El Soplao 😉
Gracias por compartir
Gracias Furgo & Porteo. La cueva es que es una pasada!
Volvimos muy satisfechos del viaje, sí. 😉